Ante la situación económica que vive España, la gente joven lucha a la desesperada por acabar sus últimos años de Licenciatura, extinguidas por el Plan Bolonia, y hacerse camino en su vida laboral. El problema llega a la hora de pensar y afrontar su nueva situación social, en la que sin estar estudiando, no les dan derecho a ser becarios. Es decir, es mejor alargar lo máximo posible la carrera para poder elaborarse su futuro, pero tampoco se puede. La implantación del nuevo modelo de plan de estudios, ‘obliga’ a sacarse las asignaturas por año, ya que será el único que tendrá clases presenciales.
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| El becario de Forges |
Ahora pónganse en la situación de los estudiantes. El 43,5% de los jóvenes de entre 16 y 25 años que desean trabajar en España no encuentran un empleo. Se trata de la tasa más alta registrada en los últimos dieciséis años. Además, las universidades cada vez ofrecen menos puestos de becarios porque tienen menos convenios. La Universidad Complutense de Madrid, tuvo 250 convenios en el curso 2009/2010 frente a los 320 del curso 2008/2009, los 364 del curso 2007/2008 y los 395 del curso 2006/2007.
Cada empresa tiene su modelo, pero se ve imprescindible una educación previa para los nuevos trabajadores. Pensando en lso medio de comunicaciópn, uno no entra en un periódico, una radio o una televisión sabiendo cómo se trabaja y cómo es el día a día. Al estudiante hay que enseñarle cada cosa, porque por más que estudian y estudian, aprenden poco de lo práctico en sus universidades, de cómo escribir, cómo locutar o cómo grabar con una cámara. Pero al final, todo queda reducido al modelo de toda la vida, el tener un buen padrino y poder entrar en un medio. Si una persona vale o no, queda aparte.
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